
Empresas que impulsan el desarrollo rural
En plena “España vaciada” pequeñas empresas y micropymes –representantes del 98% del tejido empresarial español– están liderando la reinvención del campo. Su esfuerzo diario no solo demuestra que el mundo rural tiene capacidad para avanzar, sino que lo hace combinando tradición e innovación. Desde la elaboración de mermeladas artesanas hasta la creación de cosmética a base de leche gallega, estos proyectos contribuyen a dinamizar la economía local, generar empleo y promover mejores infraestructuras, además de exigir una regulación más adaptada a sus necesidades. Este reportaje pretende poner en valor el esfuerzo y la determinación de aquellos pequeños emprendedores que apuestan por el desarrollo de su región y, en definitiva, por el futuro del mundo rural.

Confituras Tradicionales
La mermelada de toda la vida
Con el propósito de preservar la herencia familiar en el arte de las confituras, Mari Paz y Francisco José regresaron a Archivel, su pueblo natal de poco más de 1.000 habitantes. En Confituras Tradicionales elaboran mermeladas de forma completamente artesanal, siguiendo las recetas de las abuelas, y han conseguido estar presentes en los lineales de gigantes del retail como El Corte Inglés. Su cuidado proceso manual no solo mantiene vivos los métodos de antaño, sino que también conecta con las raíces familiares y contribuye al desarrollo local.

Cosmética Muuhlloa
Sacando partido a la leche gallega
Cosmética Muuhlloa nació en 2016 en la comarca de Ulloa, en el centro de Galicia, como resultado de la colaboración entre un grupo de mujeres emprendedoras. Ante la baja rentabilidad del sector lácteo, la Granja Maruxa y la cooperativa Milhulloa unieron esfuerzos para crear una línea de cosmética natural y ecológica elaborada con leche y plantas medicinales cultivadas por ellas mismas. Junto con As Vacas da Ulloa, emplean a cerca de 15 familias y contribuyen a mantener viva la región.
Decuria
El resurgimiento del hidromiel
Desde la Sierra de Gredos, en Ávila, Hidromiel Decuria se ha propuesto recuperar una bebida milenaria casi olvidada en España, fusionando tradición, sostenibilidad y sabores innovadores. Con un proceso artesanal que cui-da cada detalle, desde la selección de la miel hasta el embotellado, esta joven empresa fundada por una pare-ja emprendedora busca ganar terreno en el mercado nacional y devolver al hidromiel el protagonismo que merece en las mesas y bares del país.


Señorío de Montanera
Tradición ibérica
Reconocida en España como Pyme del Año 2019 y ubicada en Salvaleón, un pequeño pueblo de Badajoz de poco más de 1.600 habitantes, esta empresa de jamones y embutidos ibéricos ha sabido crecer sin perder su esencia. Desde su fundación en 1993 ha evolucionado de un proyecto liderado por cinco ganaderos a una red de 70 socios, generando más de 100 empleos directos y unas ventas anuales de alrededor de 19 millones de euros.
Dulces El Toro
El arte del polvorón
Fundada en 1850, Dulces El Toro es mucho más que una empresa familiar dedicada a la elaboración de polvorones y mantecados en Tordesillas (Valladolid). A lo largo de seis generaciones, ha pasado de ser una modesta pastelería local para convertirse en una empresa en expansión, con una facturación de 3,5 millones de euros y que da empleo directo a 40 personas. Su crecimiento sostenido le ha permitido consolidar su presencia en los principales puntos de venta del país, posicionándose como el productor número uno de polvorones en la región.


Quesos & Besos
Una quesería ligada a la tierra
Silvia Peláez y Paco Romero abandonaron Zaragoza y sus prometedoras carreras como ingenieros industriales para emprender un proyecto único en un pequeño pueblo de menos de 3.000 habitantes. Guarromán, en Jaén, se ha convertido en el corazón de Quesos & Besos, una quesería que fusiona tradición, innovación y sostenibilidad. Con ella aseguran la continuidad de la ganadería familiar y contribuyen a la revalorización del medio rural de la región.