El Ministerio de Fomento está preparando un nuevo Reglamento de Ordenación del Transporte Terrestre. La normativa, que está todavía en fase de borrador, responde al desarrollo de la LOTT aprobada en 2013 y puede suponer cambios en puntos importantes como las condiciones mínimas en las operaciones de una empresa de transporte, en la documentación necesaria o en los procesos administrativos y el régimen sancionador. 

Cargadores y transportistas se muestran a la expectativa de los posibles cambios y cómo afectarán a sus negocios. Por parte de la administración pública, el nuevo reglamento supone una adaptación a la normativa comunitaria para mejorar la profesionalidad de las empresas, así como para modernizar la gestión del mercado de transporte. 

Uno de los cambios importantes del reglamento es la posibilidad de usar documentos electrónicos, lo que abre algunos interrogantes para las compañías en cuanto a las inspecciones de la documentación electrónica, sobre cuál es su validez como documento probatorio o cómo se deben contemplar los procesos de firma. 

Algunas empresas como Mahou San Miguel ya han puesto en marcha una gestión a través de CMR, según su experiencia destacan aspectos como la facilidad en el control a tiempo real del transporte y entrega de la mercancía. 

El nuevo reglamento no contempla cambios sustanciales en las condiciones de acceso, sin embargo, desaparecerá la tarjeta de transporte que será sustituida por una autorización, asimismo, se creará un registro público accesible en el que consultar que las empresas transportistas cumplen con los requisitos. También se crea la figura del gestor del transporte y se podrán utilizar los documentos electrónicos que tendrán plena validez tanto del punto de vista mercantil como el administrativo.

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