C84 | Montse Castillo – RepaQ. “La reutilización implica crear una nueva industria. Necesitamos más tiempo”

Charo Toribio C84
FEBRERO 2022

Charo Toribio: ¿Cuáles son los retos prioritarios en torno a la sostenibilidad de los envases?

Montse Castillo: Necesitamos avanzar hacia un modelo de economía circular, lo que implica dejar de hablar de residuos para hablar de revalorizar el envase tras su final de vida. Ya conocemos algunas estrategias en esta línea, pero necesitamos desarrollar otras.

Reciclar los envases reutilizables. La reutilización es una buena estrategia, pero los envases reutilizables también tienen un número determinado de usos. Por tanto, necesitamos reciclar tanto los envases de un solo uso como los reutilizables al final de su vida útil.

Desarrollar el upcycling. A la hora de recuperar el material del envase y transformarlo en otro elemento, una estrategia fundamental es sobrevalorar dicho recurso a través del upcycling, con el que se logra un retorno económico superior. Por ejemplo, a partir de una botella de agua de PET, además de volver a hacer botellas de agua o desarrollar rPET no alimentario, también podemos utilizar ese material para confeccionar productos textiles. De esta forma, la materia prima entra en un flujo con un valor de mercado superior al del PET. Es decir, es posible cubrir y generar nuevas demandas en diferentes categorías que aumenten el interés por la materia prima de los envases tras su final de vida.

Mejorar infraestructuras. Aunque el reciclaje es la estrategia más alineada con la economía circular, nos encontramos con barreras. Si hablamos de plástico, el PET es el que mejor se puede separar, segregar y transformar. Pero no ocurre lo mismo con otros plásticos, que no se pueden clasificar correctamente en las plantas, por ejemplo. Desde mi experiencia, veo que los fabricantes de envases y los envasadores hacen un esfuerzo que en ocasiones queda en elementos potencialmente reci­clables, que no llegan a ser realmente reciclables. Las infraestructuras de las plantas de selección todavía tienen margen de mejora, porque no todas tienen la tecnología necesaria para separar de forma adecuada cada material.

Armonizar la definición de ‘reciclable’. Ya hay países que han comenzado a definir sus propias listas de qué envases son reciclables. Por ejemplo, Reino Unido tiene previsto etiquetar a partir de 2023 los envases como reciclables o no reciclables como consecuencia de la entrada en vigor del nuevo sistema de responsabilidad ampliada del productor que persigue obtener mayor financiación para mejorar las tecnología de clasificación y reciclaje. Se esperan listas de envases reciclables y no reciclables, revisables cada 3 o 5 años en función del avance de la tecnología. Y hay más países avanzando en la misma línea. Estas primeras políticas locales complican la gestión para las empresas internacionales, pero nos impulsan a universalizar la definición de qué es reciclable y qué no.

LAS FRASES

• Sobrevalorar. Es fundamental sobrevalorar el material del envase a través del upcycling en otras categorías, como el textil, logrando un retorno económico superior.
• Definición de ‘reciclable’. Las distintas definiciones por países de qué es reciclable complican la gestión para las empresas internacionales, pero impulsan la armonización del término.

• Responsabilidad. La clave es definir en manos de quién dejamos que el envase reutilizable esté en condiciones higiénicas adecuadas. No habrá problema si es la industria, que tiene el know how para garantizar la seguridad alimentaria.
• Instrucciones de reciclaje. . Para reciclar correctamente necesitamos transmitir instrucciones al consumidor, que por toda la información que recibe, acaba desinformado.

 

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CHARO TORIBIO
C84
ctoribio@aecoc.es